20 julio 2018

¿Por qué es tan poco popular el té?


Como persona convertida a las bondades, sabor y magia del té puro (verdadero, medicinal, herbal, tisanas, etc.) y con puro me refiero a: sin leche y sin endulzantes, me es muy difícil encontrarlo fuera de mi casa.

Al inicio me parecía muy extraño, quizás era que tenía mala suerte, quizás no era temporada de té (?? ??), ¿quizás tenía otro nombre? (Ej. Delicia de hoja infusionada en agua de manantial, llevada a ebullición por sublimación de producto mineral). Era muy joven yo, pues.

Mis primeros encuentros del tercer tipo con este tipo de fenomenología se podían describir en la siguiente conversación:

Yo: ¿Para tomar qué tiene?
-Sodas, aguas frescas y té.
Yo:-¿El té de qué es?
-Uhh bueno señorita, tengo de durazno y limón.

Confused black guy

Yo: Uh, ¿es dulce?, ¿es negro? o ¿verde?
El mesero con una cara de impaciencia: es Fuze tea.
Yo: ¿Tiene agua natural?
-Por el momento no tenemos, nadie nos había pedido antes…















Y así sucesivamente, una y otra vez. Cuando tengo suerte tienen té MOormick de limón, manzanilla, hierbabuena o manzana canela. En los restaurantes japoneses casi siempre tienen verde. En los cafés más comunes encuentro versiones sencillas al mismo precio del café. Ej. En D’volada donde ahorita estoy escribiendo este post, el té de 16oz. está a 45 pesos (como referencia un chocolate con leche cuesta $48.00). No veo la fuente pero probablemente sea Stash o de hoja suelta medio genérico. Hay otros lugares como el Maya Java, Velvet, etc. que si tienen tés variados y ricos, pero son excepción a la regla.

En casa a cada visitante, a menudo siempre ofrezco té. Tenemos muchísimas variedades. Pero 8/10 veces me piden leche, azúcar, miel o hielos antes de probarlo. Mi pensamiento interno siempre es: –

Al menos dale una probadita purooo, te va a encantaaaaar ”. (QUE OJO, aunque le echen la lata entera de lecherita, me encanta ofrecerles té.)

Yo recuerdo mis pensamientos de adolescencia: “¿Té? no gracias”. Porque la única experiencia que tenía de tomar té eran medicinales mexicanos que te purgaban el alma de amargos. De probar en probar de tés dulces a a amargos bien preparados me fui sensibilizando. Hoy en día es mi bebida favorita, tanto así que me encantaría tener un negocio  “casa de té” para compartir su magia y sabor.

Definitivamente el gusto por el té es adquirido, tal como el gusto por el vino y la cerveza. Me encanta compartirlo con mis amigos y familia, me encanta tomarlo a diario, probar nuevas variedades y técnicas para prepararlo, disfrutar su aroma y hasta sentir que estoy tomando tierra mojada (como con el Pu’er por ejemplo).

Mi post es en exhortación y divagación (emoji de risa con lágrimas) a los lugares especializados de café o restaurantes, para que pudieran tener mayor variedad o siquiera la opción de bebidas no endulzadas como el té. Un buen té verde frío es muy barato de producir y se almacena muy bien.

Pienso que ganarían más clientes como mi familia, mi esposo y yo. A menudo no salimos a comer por las limitadas y a veces pésimas opciones de bebidas que ofrecen los restaurantes (y si pides agua te traen una embotellada, negándote un vaso con agua).

Muy a menudo escucho comentarios en defensa de mis quejas y en argumentos para prolongar la desvalorización del té tipo:
  1. Es que NADIE toma bebidas sin azúcar, tú eres la rara. (Y el agua qué??? image)
  2. Es que hace mucho calor, nadie quiere algo caliente en tiempo de calor y hacerlo con hielos es difícil. (Pero veo que en el menú hay Iced coffee? image)
  3. Es que están bien malitos.
  4. -Yo si tomo té, pero solo del verde, me lo recomendaron para la salud y bajar de peso, está bien rico. Yo: ahh que bien! de cuál tomas?*
     
  5. No tiene suficiente factor levantamuertos (o el equivalente del efecto de la cafeína). (Have you tried black tea w/out milk?)
Lo que creo yo, es que a todos beneficiaría tener a la mano opciones sin azúcar (independientemente de los beneficios nutricionales de los diferentes tipos de tés o tisanas), o que el té aumentara su presencia entre la población en general.
Razones por las que creo yo que el té como bebida no es una opción para la mayoría de las personas (incluyéndome en su tiempo).
  1. Las personas normales rara vez tienen la opción en el mercado, hablando de té que no tengan que infusionar ellos (ver puntos anteriores).
  2. A todo lo calentado o hervido en agua le llaman té. Hasta el caldo de pollo es té en veces.
  3. Para tomar té debes de estar enfermo (refieriéndose al té medicinal).
  4. Porque no lo venden en formato de 3 litros en los refrigeradores del Oxxo (chiste malo refiréndose a la soda).
  5. No conocen a nadie que lo tome regularmente, no les llama la atención o simplemente no les ha gustado.
  6. Lo comparan al café y no toman nada que no sea café.
  7. Razones obvias: nunca ha sido parte de nuestra cultura, salvo en formato medicinal.
Estoy abriendo un diálogo generalizado y cómico sobre tomar y disfrutar el té en sus cientos de presentaciones. Por ejemplo, a mi no me gusta el café y es algo enteramente personal, tengo mis razones chistosas y otros tienen derecho a preguntarme.

¿A tí te gusta el té? ¿Por qué tomas o no tomas té? ¿Algo que quieras agregar?

* Información nutricional de Fuze tea 600ml
Información nutricional de Fuze Tea de 600ml (48gr es igual a 12 cucharaditas)

26 enero 2018

RAMBLE


Tengo que escribir, es de mis sueños de juventud más grandes.
No escribo porque tengo miedo a la autocrítica, al juicio propio y a la falsa idea de profesionalidad que también me impide dibujar, diseñar o hacer cualquier cosa libremente.
No quiero escribir con un motivo profesional, quiero escribir para desarrollarme, para explorar ideas, para voltear atrás y decir que mi mente ha mejorado, ha cambiado o ha explorado más las ideas que llevan años ahogándose en el anonimato.

Tengo que escribir sobre mis sueños apocalípticos de adolescencia, sobre los vínculos divertidos que encuentra uno entre disciplinas opuestas (ej. biología y arquitectura o política y biología? ja). Sobre lo que aprendo año con año de mis alumnos, sobre ideas que considero son geniales! (aunque quizás no lo sea), sobre mis diálogos con mis plantas, mis planes de tener pericos o del fin del mundo.

No pretendo escribir para nadie más. Escribiré para mi. Para ver cuánto se ha degradado mi gramática, mi comprensión lectora y mis ideas en todos estos años que le tuve miedo a mi blog, miedo a no hacer las cosas bien porque adoraba la perfección.

Este año estoy convencida de que tengo que HACER, HACER HACER y HACER. Eventualmente mejoraré y encontraré lo que aún no se que busco.


JAAA

ya.