Caza de telas

El sábado salí con algunas de mis amigas de manera repentina e improvisada. Originalmente mi plan era ir con Paola a buscar encajes y telas para elaborar entre los dos, un vestido lolita. Afortunadamente se nos unieron Dulce y Gabriela y la excursión fue aún más divertida y yo tomé mi papel de guía turístico ya que conozco un poco el centro histórico de la ciudad.

Al parcer encontramos todo tipo de cosas muy lindas, solo que compramos lo que el presupuesto permitiera, como estos encajes y listones. En las fotografías se comparan con una posible tela base con la que se confeccionaría el vestido.



La combinación de colores nos recordó al OP de BABY: Claudia, the fairytale princess.



En lo personal estoy muy entusiasmada al respecto! Ordené por amazon el libro de costura “Otome no sewing, Book 2” el cual tenía algunos patrones muy lindos por aquello de que queramos algo especial, ya que en sí, los patrones de los vestidos lolita no son tan complejos como lo vendría siendo un vestido de moda civil.



También tomé una foto de estas telas con las que me gustaría experimentar algo retro:



Por mi parte, yo compré un encaje algo grueso (imágenes más abajo) y entre todas pagamos medio metro de peluche muy fino color pardo para hacernos cuellos desmontables invernales! estoy muy entusiasmada al respecto :3
Después las llevé a comer a este lugar que me gusta mucho porque es rico, accesible y tiene muchas opciones. Se encuentra en el estacionamiento del Jai Alai y se llama “El Tucumano”, es un restaurant argentino donde uno puede comer bien y rico!



Esperamos un ratito porque estaba lleno y tomamos unas fotos. A veces creo que me emociono mucho y me acelero mucho, dejo de hablar, camino rápido y entrecierro los ojos con la mira en la meta y me tomo las cosas algo enserio jajaja, pero luego me tranquilizo y todo sale bien. :)



Ya en mi casa y como cada vez que compro telas, me puse a lavar lo que me traje a casa. El encaje bonito que mencioné anteriormente:



Y el tul de corazones que compramos entre Paola y yo:



Un poquito de Vel Rosita, una bandeja y listo.



Con el peluche, usé un jabón especial llamado “aquilaun” que mi mamá tenía porque se terminó el Vel Rosita. Se supone uno debe lavar las telas y todo lo que vaya a ser usado en costura de manera previa para que luego no se tope uno con sorpresas de que se encogió, se deformó o se deslavó y manchó otras telas usadas en la misma prenda.



Y la otra, porque la tela fue conseguida en una tienda de retazos y toda la gente gusta de tocar y acariciar los peluches. En el tambo se observa toda la suciedad y tinta que soltó el pedazo de material que compramos.



Una foto del shampoo para telas que utilizé. Eso si, esta vez no usé suavizante de telas para ninguna de las dos ya que la última vez que lo hice, los encajes quedaron muy aguados… al menos esta vez experimentaré sin suavizante.

Por cierto, para exprimir mis telas siempre uso la lavadora y después las cuelgo en la sombra para que se terminen de secar. Las piezas delicadas como el encaje siempre las meto en una red para que no se vayan a romper o enredar en el motor de la lavadora. De esta manera nunca he tenido problemas.



Y por último, compilé algunas de las ideas que pudieran funcionar para el vestido de Paola, como el tronco del vestido de Claudia, el cuello del Fragant rose memories, detalles de chiffon y encaje en la falda y así. Una vez que Paola decida el diseño, procederemos a calcular materiales y traducirlo en patrones para luego ponernos a trabajar! Por lo pronto estaremos elaborando un petticoat para darle el poof perfecto.



Me emocionan los proyectos de costura ya que me recuerdan a los proyectos arquitectónicos, con la diferencia de que el resultado final casi siempre es más gratificante en costura ya que son piezas para uno mismo realizables en corto tiempo. Y mi lema en estos casos es: "si no se hacerlo, averiguo y practico hasta lograrlo” Siempre ha funcionado y por eso no le temo a retos así.
¡Hasta pronto!